Sí, a todos nos ha quedado claro que estamos en la era de los contenidos, que
la revolución iniciada con el 2.0 ha eclosionado la creación de contenidos
mediante la apertura de las puertas a la participación colectiva, a las opiniones
masivas y a la rapidez para compartir información. Ahora navegamos en un mar de
contenidos agrupados en la red, y el objetivo cambia de ser visible
publicitariamente en marca o productos, a ser
el “top of mind” a través de los contenidos.
Es importante diferenciar entre publicidad y generación de contenidos,
porque aunque parece evidente, hay muchas empresas que generan contenidos semi publicitarios.
Esto lo que hace es saturar aún más ese mar de información y dificultarnos la
búsqueda de valor en los contenidos.
¿De qué puede hablar una empresa a sus consumidores? Sobre todo de temas
útiles, pero no ha de ser la empresa la que “hable”, sino personas que
conforman esa empresa con otras muchas personas, porque ahora es un diálogo.
Pueden hacerlo a través de blogs, redes sociales, foros, etc. Han de hacerlo
sobre lo que los consumidores y el perfil de potenciales consumidores quieren
escuchar, y en el lenguaje y medios con los que les quieren escuchar, porque como
hemos dicho, es un diálogo.
Generar contenido de valor es una vía para estar en el top of mind, porque
una vez que el público detecta un medio que le es útil o interesante, termina
por ser recurrente. La planificación de generación de contenidos es un tema
estratégico y debe ser incluido en el plan de comunicación.
Ser activo en la red significa que marcar un blog como favorito y seguirlo es
un gran logro para su creador, encontrar información de interés y aportar pasa
por segmentar a los propios contactos, o al menos la información generada.
Estar en las redes activamente implica hacer un esfuerzo de empatía para
seleccionar y generar temas de interés. Recordemos que estamos construyendo
algo entre todos y para todos.
Nuestra obligación pasivamente es la segmentación de la información, para
poder asimilar la parte que nos interese y poder dejar espacio para ser
creativos. Si intentamos asimilar todo lo que recibimos, nos empacharemos.